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Elena y el Sr. García habían estado disfrutando de su relación secreta durante meses, descubriendo nuevos aspectos de sus deseos y fantasías con cada encuentro. Esta noche, decidieron invitar a alguien especial para enriquecer aún más esta experiencia.

Llegó la hora acordada, y Elena abrió la puerta para recibir a Sofia, una mujer transexual que había conocido hace algún tiempo en un evento de diversidad sexual. La invitación a su casa fue aceptada sin dudarlo, ya que ambos habían quedado impresionados por su elegancia y carisma.

Sofia llegó acompañada de una botella de vino y una sonrisa. Elena la abrazó con afecto mientras el Sr. García les ofrecía sendas copas de cristal llenas de vino tinto. La conversación fue fluida, y pronto se encontraron hablando sobre sus respectivas experiencias como transexuales.

Mientras tanto, el ambiente en la habitación comenzaba a caldearse. Elena y Sofia compartían risas y miradas cargadas de significado mientras el Sr. García las observaba con interés. Pronto quedó claro que ambos estaban atraídos por la presencia de Sofia, pero también sabían que era ella quien había iniciado esta aventura.

Después de un rato, Elena sugirió que se cambiara y fuera al dormitorio. El Sr. García no tardó en hacerlo, dejando a Elena y Sofia solas en la sala de estar. Sofia se quitó su ropa interior, revelando sus generosos pechos y una pelvis firme y bien cuidada.

El Sr. García salió del dormitorio, desnudo y erecto. En ese momento, Sofia hizo un gesto hacia él, indicándole que se acercara. Él obedeció, y ella comenzó a besarle en los labios mientras sus manos exploraban su cuerpo.

Mientras tanto, Elena observaba la escena con atención, sintiendo cómo el deseo la invadía. Sofia hizo un gesto hacia ella, invitándola a participar. Elena se acercó, y pronto Sofia comenzó a besarla también, mientras sus cuerpos se fusionaban en una sola entidad.

El Sr. García observó durante un momento. Pronto todos se encontraron enredados en un abrazo apasionado, con manos y lenguas entrelazadas en una danza erótica.

Después de un rato, Sofia hizo un gesto hacia el dormitorio y todos se levantaron para seguirla. Allí, ella tomó la iniciativa, guiando al Sr. García hacia la cama mientras Elena se sentaba frente a ellos.

Sofia comenzó a darle una felación al Sr. García mientras Sofia penetraba a Elena con fuerza. Sofia continuó estimulando su miembro con sus labios y lengua, mientras Elena gemía de placer bajo el impulso de Sofia.

De repente, Sofia se levantó y montó a Elena desde atrás, mientras el Sr. García continuaba penetrándola. La nueva posición provocó que todos llegaran al clímax casi simultáneamente. El Sr. García eyaculó dentro de Elena mientras ella gritaba de placer.

Sofia hizo un gesto hacia abajo y comenzó a lamer la punta del pene del Sr. García, mientras él continuaba jadeando en el límite del orgasmo. De repente, Sofia giró su cuerpo para tomar al Sr. García desde atrás, y Elena recibió sus fluidos en la boca.

El Sr. García lanzó un grito de placer mientras eyaculaba dentro de ella, y Elena lo recibió con gusto, sabiendo que era parte de este ritual de amor y deseo compartido.

Cuando finalmente se calmaron, todos se abrazaron suavemente en la cama, sintiéndose conectados por esta experiencia única. Fue una noche inolvidable para ellos tres, llena de placer, pasión y descubrimiento. Desde ese momento, su relación se convirtió en algo aún más intenso y satisfactorio para todos ellos.

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